Gracias, merci, thanks

Gracias, merci, thanks

miércoles, 9 de julio de 2008

Historia de Bolsas perfumadas


El Origen de las bolsas perfumadas


El cinco de mayo de cada año, todo el mundo celebra el festival de la regatas del dragón. Entre todas las actividades tradicionales, quizá nada contribuya más a la atmósfera festiva de este día que la realización y el uso de las bolsitas perfumadas. Antiguamente, y debido a un estado no muy avanzado de las medicinas, la gente molía varios tipos de minerales y yerbas desinfectantes como oro pimente, artemisa y cálamo y los envolvía en bolsitas que luego colgaban cerca de su pecho. El olor que desprendían estas bolsas servía para protegerse de los insectos y bacterias del verano. Este es el origen de las bolsitas perfumadas.



En realidad las bolsas perfumadas no son más que especias envueltas en un trozo de tela. Pero como antiguamente las mujeres cosían muy bien, las bolsas cada vez se hacían más exquisitas y atractivas. Además, estas bolsas cosidas con mucho mimo estában imbuidas de un profundo sentimiento. Regalar una de estas bolsas tan fragantes no es sustituible por un tarjeta de felicitación.



Las bolsas perfumadas también se denominan saquitos perfumados. ¿Cómo se han desarrollado? El mes de mayo se llama también popularmente el mes del veneno. De acuerdo a los “Anales de costumbres locales”, el cinco de mayo marca el primer día del solsticio de verano y es también el día del festival del firmamento. En este día, la gente crea todo tipo de objetos para ahuyentar el mal. En los Anales de Ching y Ch’u está escrito que en el festival del barco de dragón, se recortaban tigres hechos de artemisa o de tela que servían para ahuyentar todo aquello que poseyera algún veneno. Otro texto, El libro de las costumbres nota que en las muñecas de los niños se ataban hilos de cinco colores que simbolizaban la larga vida y se denominaban los hilos de la larga vida.



Estas dos costumbres fueron poco a poco convirtiéndose en una sola. Se hacían bolsas de oro pimente, artemisa, y sándalo blanco. Las especias se molían y se colocaban dentro de unas bolsitas que se ataban con cintas de cinco colores. Estas bolsitas se colgaban de los niños para alejarles de bichos venenosos. Su función era la de proteger a los niños de animales venenosos y del mal en general, pero además, estas bolsitas acabaron por convertirse en símbolos de buena suerte. Esto estableció la posición de las bolsitas perfumadas en la historia de la tradición china. En la sociedad tradicional china, la fabricación de estas bolsas era una buena oportunidad para que las mujeres mostrasen su habilidad con la aguja, habilidad que se podía ver por el diseño y el bordado de las bolsitas.



El significado de las bolsitas perfumadas


En algunos lugares aún se mantiene la costumbre en la que las recién casadas tienen que ofrecer una bolsita perfumada a cada uno de los miembros de la familia. La gente cree que las recién casadas traen buena suerte y que una bolsa cosida por su propia mano puede repeler el mal con más fuerza. De forma que el primer año de casada, en el día del festival de las regatas, la recién casada tiene que coser gran cantidad de bolsas que entregará a toda la familia y cuyo número puede llegar a ser entre cien y doscientas. Por supuesto que además de entregar bolsitas a todos los familiares, también se hacen muchas para que se cuelguen los niños. Esto refleja la inquietud de los mayores por la generaciones más jóvenes, y el deseo de que estos jóvenes crezcan felizmente y sin preocupaciones. También se pueden regalar bolsitas a las personas mayores para expresar respeto.



Pero aquellas bolsas que se regalan a los amantes tienen un significado aún más profundo. Puntada tras puntada, estas bolsitas expresan sentimientos profundos. Antiguamente, las mujeres, cuando los hijos o amantes se iban a hacer un largo viaje, les bordaban una bolsita para que la llevasen colgada. Esto se hacía en parte para protegerles durante el largo viaje deseando que transcurriese sin novedad, y en parte para recordarles que su familia les estaba esperando en casa para que volviesen pronto. Esta costumbre tan perfumada ya casi se ha perdido.



En nuestros tiempos, como la medicina ha progresado mucho, la función disipadora de estas bolsitas ha ido desapareciendo. Además, en las sociedades industriales la vida es más agitada y cada día hay más mujeres profesionales que trabajan. Como ya no tienen tiempo libre para aprender a hacer punto, cada año, por las fechas del festival aparecen muchas bolsas en los mercados. Aunque los diseños bonitos permanecen y están bien bordadas, inevitablemente les falta la artesanía. Además, la fragancia esta elaborada con productos químicos y pierde rápidamente el olor. Pero aún más importante es que la gran cantidad de estas bolsitas hechas a máquina ha hecho que se pierda el interés que aportaban a la vida diaria de las personas la fabricación de las bolsitas perfumadas tradicionales y sus suaves fragancias.


0 subpuntadas: